CLIN CLIN...

Clin clin, estoy muriendo en tus
manos


Clin clin, este amor me está
matando


¿Cómo sacarlo de mí? ¿Cómo
matarlo?


Como exprimirlo hasta morir con
mis propias manos.





¡Matarlo no podre!, pues se niega
a morir,


Estoy destinado en vuestras manos
a sufrir,


A depender de tus labios, de tu
forma de reír,


De los instantes fugaces que me
dejes a mí.





La felicidad me es indiferente,
ya se parece a ti,


Me la das a cuenta gotas, ¡dan
ganas de morir!,


Se me salen las lágrimas al verte
salir,


Cual pajarito que se escapa de su
jaula sin poderlo impedir.





Cuánto dolor me causas, ¿Cuánto
he de aguantar?,


a veces me dan ganas de ponerme a
descansar,


de arrancarte de mis entrañas,
más me pongo a llorar,


Recordando lo que no me diste, y
el dolor que me das.





El tiempo me es infinito, cuando
lejos de mi te vas,


Tan linda, tan bonita, ¿te irás a
caminar?


A refrescarte con la lluvia, ¿tal
vez a comprar?


¡vuelve rápido chiquita! Que la
incertidumbre me va a matar.





Cual danzarina de Silva


Se va a morir, se muere… se mata.